Este viernes se aprueba la renta mínima vital, unos ingresos que llegarán a 850.000 familias y que oscilarán entre los 461 y los 1.100 euros mensuales, siempre y cuando se cumplan los requisitos requeridos. Pero, ¿cómo afectará esta herramienta de recuperación económica a la situación actual en la que está inmersa España? Nos lo explica José Mariano Orenes Bastida, consultor económico financiero de Profinanza.
«La renta mínima vital es muy interesante cuando hay pleno empleo, porque es un instrumento que permite asegurar a las familias que se encuentran en situación de pobreza cierta estabilidad financiera», nos cuenta José Mariano Orenes, quien añade que la situación de España, en lo referente a esta herramienta de recuperación económica, «tiene dos particularidades: la tasa de paro del 14% actual y una economía sumergida del 22%».
Debido a la crisis ocasionada por el coronavirus, las previsiones de la Comisión Europea son que el nivel de desempleo en España roce el 20% este 2020 y baje alrededor del 17% en 2021. Por este motivo, Orenes incide en que «es muy probable que haya gente que prefiera trabajar en B para cobrar la renta mínima, lo que incrementaría la economía sumergida».
Respecto a la recuperación del tejido empresarial de la Región y en lo referente al «impuesto de reconstrucción» para las rentas más altas mencionado por Iglesias esta semana, el consultor económico financiero destaca que muchas empresas «están emigrando a Portugal» por los beneficios y la seguridad que se les ofrece.
«Las empresas hay que mantenerlas sea cómo sea, no se puede abandonar a ninguna en este momento», explica Orenes, quien justifica que «ahora se trata de una crisis sanitaria, no de un problema de la estructura de la economía como en crisis anteriores».
El consultor económico de Profinanza destaca que las ayudas económicas para autónomos y empresas que se están implementando pueden ser reforzadas con «una alianza entre el Gobierno regional y las entidades financieras para lograr una financiación efectiva independientemente de la situación actual de cada empresa» y añade que en este momento «una planificación de presupuestos a corto y medio plazo, junto con la alianza de varias empresas del mismo sector y la reducción de la incertidumbre de la situación actual» podrían ser clave para la recuperación de este sector.
Finalmente, José Mariano Orenes hace hincapié en la relevancia que tiene para la Región recibir los 4.300 millones de euros de las ayuda europeas, tal y como reclamaba ayer la Consejera de Empresa, Ana Martínez Vidal.